Hace mucho tiempo, diría yo que hace casi mil años, un grupo de amigos decidimos escribir unos relatos cuyo único tema sería un continente. Los sorteamos y a mí me tocó bailar con la más fea “Oceanía”. El otro día encontré las notas de un relato que jamás escribí. Había una montaña encantada, dos viejos amigos y calcetines, muchos calcetines. Nunca llegué a terminarlo ni sé cómo lo terminaría. Pero sería interesante.
1 comentario:
Podrías hacer un montón de fundas para móviles que acabo de leer que el imán de las fundas duras reduce la duración de la batería en un 50%... Yo te paso la máquina.
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