lunes, 15 de diciembre de 2014

lunes, 8 de diciembre de 2014

Kaname y Luna


Trenzas




—¡Tienes las coletas torcidas! —eso llevaba corroyéndole desde que la había visto salir del coche. Era una niña preciosa, con un vestido precioso, realmente educada, aunque algo tímida. Aquellas coletas no pegaban, estaban fuera de lugar.


—No digas eso —dijo con una voz muy suave, mirando al suelo.
—¿Te las has hecho tú? No están mal, para alguien tan pequeño —¿cuántos años tendría?, ¿tres, cuatro?
La niña frunció el ceño y le embistió con la cabeza, molesta, haciéndole tambalearse.
—¡Eh…! —no podía creer que le hubiera hecho algo así.
—¡Noel! No puedes pegar a la gente cuando te digan algo que no te gusta.
—No le gusta mi pelo.
—¿Qué tienes contra el pelo de mi hija? —conocía a Lisa, sabía que estaba a punto de pegarle un puñetazo y no sabía por qué. Sólo había dicho que las coletas estaban torcidas, no era para ponerse así. Pero debía pasar algo con el pelo de Noel, quizás incluso con sus ojos. Parecía una niña muy directa, pero solía rehuir la mirada de la gente, lo había notado las veces que la había visto con Lisa.
—Sólo he dicho que las coletas estaban torcidas.
—¿Noel?
El teléfono de Lisa sonó y palideció al reconocer el número—: ¡Discúlpate, Noel! Es una llamada importante —entró en la casa, buscando algo de privacidad y mejor cobertura.
—Lo siento, Jin-san —hizo una profunda reverencia.
Jin cogió un mechón del pelo de Noel—: Es bonito —tiró de las gomas de las coletas hasta deshacer las dos.
—¡Eh! ¡Me las hizo Eiki!
—¿Nomura? Es realmente malo… ¿Cómo dejas que peine ese precioso pelo?
—Papá y mamá trabajan mucho, Eiki cuida de mí. Él me peina y me ayuda a vestirme.
Jin se tapó la boca con la mano, eso lo explicaba todo. Se había molestado porque Eiki era quien la peinaba, tenía que defenderle. Sacó un cepillo de la cartera que llevaba al hombro, y empezó a peinarla, tenías las gomas en la muñeca. Sacó la botella de agua y mojó un poco el pelo y sus manos, para poder peinarla bien y fue trenzando el pelo en dos largas trenzas. Con el pelo entre sus dedos, notó que algo no iba bien, había un gran trasquilón que Eiki había intentando tapar. Alguien le había cortado el pelo salvajemente. Tenía varios trasquilones más.
—No les gusta mi pelo, dicen que no se parece al de mi padre.
—A mí me gusta. Tiene un color bonito.

—Le encanta —sonrió—. No ha dejado de pavonearse con el peinado por toda la casa. Se te da bien.
—Es una simple trenza, es como trenzar cuerda.
—Lo has visto. No se me da bien peinar —se tapó la cara con la mano—. Y me cuesta no ir a su clase a pegar a ese par de niños. No la dejan en paz. El otro día le tiraron un vaso de zumo de uva sobre su vestido nuevo. Se puso el abrigo por encima y no dijo nada. No sé qué hacer con ella. No sabe defenderse.
—Me pegó.
—Eso es raro.
—Dije que tus coletas estaban torcidas.
Eiki se soltó a reír a carcajadas—: I love her so much.
—¿No te da vergüenza decir algo así?
—No, esperaré a que cumpla 20 años, se la robaré a sus padres y me la quedaré para mí.  
—Pervertido.
—Me cambiaré el nombre de Eikichi a Echi. ¿Te gusta Noel?
—¿Qué tipo de pregunta es esa?
—No sé si podría estar con alguien al que no le gustara Noel.
—Siempre que no le digas que piensas abandonarle en cuanto Noel cumpla 20 años, no creo que le importe. 
—Pues tú ya lo sabes —cerró los ojos—. Así que tengo un problema.

lunes, 27 de octubre de 2014

Ausencia

Tu ausencia duele, como un cuchillo clavado en el alma que no deja de removerse, y que no deseo arrancar.

sábado, 25 de octubre de 2014

sábado, 20 de septiembre de 2014

miércoles, 23 de abril de 2014

viernes, 18 de abril de 2014

Adoro

Adoro las diferencias. Adoro que haya altos y bajos, gordos y delgados. Blancos y negros, y grises y rojos y verdes y azules y amarillos e incluso a ratos rosas. Pq realmente odio el rosa, pero ¿qué haría sin el rosa al que tanto puedo odiar?
Me gustan los grises, los sies, los noes, los cristianos, los judíos, los musulmanes, ateos, shintoistas, animistas, budistas, hinduistas y todo aquel que cree en D's o no a su propia manera.
Me gustan las diferencias, me gustan los tonos altos y bajos, los perros grandes y pequeños, las diferentes texturas incluso q exista esa q odio q hace q al tocarla sienta deseos de arrancarme la piel de la mano.
Me gusta el invierno, y el verano, y el otoño y a ratos incluso la primavera. Me gusta el mar y la montaña, el desierto, la playa, los bosques, el cielo azul y la lluvia.
Me gustan las cosas diferentes, las canciones suaves y las canciones pesadas.
Me encanta la gente diferente, la q busca su lugar en el mundo y cree q no es más q una gota en un oceano de gotas. Y aunque es una gota dentro de un oceano de gotas acaba montando su propia secta, o familia, o grupo de amigos. Gotas q se preocupan de otras gotas, q acompañan a otras gotas.
Detesto los días de melodrama, los dolores de cabeza, las malas noticias, la hipocresía, el dolor, la tortura y la ira lanzada contra otra persona. Odio sentir miedo, no controlar lo q me rodea, no lograr avanzar y sentirme mil veces lejos de donde esperaba estar cuando ni siquiera esperaba nada.
odio ponerme a escribir sin saber pq, como si sin un teclado o un lapiz me sintiera vacía. Pero en el fondo me encanta.

jueves, 20 de marzo de 2014

sábado, 8 de febrero de 2014

Böse Mädchen


La canción de Eisbrecher (Rompehielos - traducido al castellano) se llama Chicas Malas. 
Es una declaración de amor para ese tipo de mujeres que se hacen las duras y frías, pero son tiernas y suaves. 
Una deliciosa canción. 
Tengo el día sensible 

Ich liebe dich.

sábado, 18 de enero de 2014

Sonido melancolico



Y esa sensación extraña cuando escuchas una canción y piensas: 
"¡Me encantaba esta canción!" 
Y mientras la escuchas te das cuenta de que aún te gusta.

viernes, 3 de enero de 2014